Han pasado casi 40 años. Todavía recuerdo claramente los acontecimientos.

Yo era solo un niño entonces, 7 años de edad si estoy adivinando correctamente. No importa el número.
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Fue en mi cumpleaños que lo quise. Un loro. Verde brillante. Me había gustado el pájaro en la tienda de mascotas. Supongo que todos sabemos lo que sucede cuando los niños "se imaginan" algo en la tienda.
Pasé una semana entera razonando con mi padre sobre las maravillas de un loro, cómo me traería buena suerte y me convertiría en un niño obediente. Pero a lo largo de los años mi padre se había acostumbrado a mis formas de persuasión.

"Vamos a ver sus resultados en los exámenes, y luego decidiré. Además, no es correcto enjaular a un ave ". Era tan bueno como decir un" no "directo.

No importa lo bueno (o malo) que fuera mi rendimiento académico, el loro no debía ser mío. Como cualquier otro niño, estaba herido y enojado. ¡Hice un voto para vengarme de mi deshonra! El hogar era un campo de batalla. Me sentí como un joven rebelde. Pero tales rebeliones suelen ser aplastadas en su infancia.

Con el tiempo, me retiré de la rebelión y llevé la vida de un ermitaño.

Este fue solo uno de los incidentes que menciono para revelar las miserias de mi infancia. En años posteriores, llegué a saber que no soy el único niño que sufrió estas "miserias". ¡Noventa y nueve de cada cien niños toleraron esto! El mundo debe ser un lugar cruel.

Pasaron los años y crecí bastante bien (sin el loro). Mi madre siempre ha sido amable y comprensiva (en el sentido de que nunca se opone a nada de lo que digo o hago). Estudié para ser ingeniero y me fue bien. Salí de mi ciudad natal cuando tenía 23 años para trabajar. Vi menos de casa después de eso.

Mi padre estaba en contra de mi partida. No es que mi madre quisiera que me fuera, pero me apoyó. Al final, siendo inflexible, mi padre aceptó no causar más problemas. Me sentí aliviado de haber escapado finalmente. Estaba tan dispuesta a enfrentar al mundo por mi cuenta.

Mi trabajo me llevó a diferentes lugares. Apagó mi pasión por viajar hasta cierto punto. En resumen, amaba mi trabajo y mi forma de vida. Regresé a casa rara vez, tal vez una vez al año o incluso menos.

Mi padre falleció cuando yo tenía 29 años.

Volví a casa por un mes. Mi hermano acababa de graduarse entonces. Cuando me fui, mi madre no me pidió que me quedara por un par de días más. Pensé que lo haría, pero estaba agradecida de que no lo hiciera. Mi hermano tomó un trabajo en la ciudad y decidió quedarse en la ciudad. No tuve mucho que decir al respecto, me alegro por eso.

El tiempo pasó volando y me hice mayor (y más débil). Mi hermano se casó 5 años después. Fue toda una fiesta. Incluso conocí a algunos de mis viejos amigos entonces. Mi madre estaba realmente feliz por él después de que yo fuera una decepción (tal vez ella no pensaba lo mismo de mí, pero la idea seguía rozando mi mente).

Tuve un sobrino 6 años después. Mi madre lo llamó Siddhartha. Little Sid. Compartimos todo un vínculo. Nunca tuve muchos amigos, pero de alguna manera fue más fácil conectarme con Sid. Supongo que fue porque no nos entendíamos mucho, solo lo que era necesario para un vínculo duradero. Quiero decir, incluso cuando veo a otras personas con sus amigos, parece un equilibrio tan delicado. No tienen que compartir todo para convertirse en amigos, solo lo suficiente para alimentar la amistad.
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Solíamos charlar a veces a través de Skype, cuando no estaba muy ocupado. Me cuenta todo sobre la escuela y sus amigos, aparentemente tiene muchos. Por supuesto, no puedo hablar sobre mi trabajo pero trato de contarle sobre mis días de escuela. No hay mucho que contar. Es como si le estuviera contando a un chico que nunca ha asistido a la universidad sobre el programa y la rutina de la universidad, de modo que le emocione de todos modos. Pero Sid es un oyente atento. También le gusta mucho trabajar en el jardín con su madre. No le gustan mucho las flores, pero le gustan las altas y fuertes, como el abeto o la Sal. Solo hay un árbol de Sal en el jardín, tiene solo 7 pies de altura. Pero Sid lo cuida muy bien, dice que lo convertirá en el árbol más fuerte del mundo. Mi hermano puede encontrar esto molesto a veces, pero me alegro por ello. No solo debe saber el valor de las cosas, sino también cómo cuidar las cosas que uno valora.

Bueno, tanto por el pasado. En este momento, estoy viajando a mi ciudad natal después de dos años. Sucede que es el cumpleaños de mi sobrino al día siguiente. Cumplirá 7 años. Mi cuñada me ha estado pidiendo que visite durante los últimos meses, así que pensé que también podría aprovechar esta oportunidad para un descanso muy necesario. Así que aquí estoy.

Mi hermano me recibió en la estación de tren. Tomamos un taxi a casa. Tuve que hacer una breve parada en una tienda en la carretera para el regalo de cumpleaños. Debo decir que es un trabajo difícil, elegir un regalo para una persona. Uno siempre quiere que no sea ni demasiado costoso ni demasiado barato, me siento en una situación como equilibrarme con un cable tenso.

Eran las 7 de la mañana. Afortunadamente, dormí bien anoche y el viaje temprano por la mañana es refrescante. Llegamos a casa alrededor de las 8:40, Sid ya estaba despierto para entonces. Al oír la conmoción, corrió escaleras abajo. Mi madre wa
todavía está dormida, no le ha ido muy bien durante las últimas dos semanas. Se lanzó sobre mí tan pronto como lo vi.  Bueno, exactamente. La bienvenida que esperaba de él. Me las arreglé para decir "Feliz cumpleaños, Rhino. Por favor, no me mates, traje una ofrenda en tu honor "Eso hizo el truco, estoy a salvo. Sin mucho retraso le entregué su regalo. Debo decir que está bastante asombrado por el enorme paquete. Quiero decir que no era muy grande, pero en comparación con el tamaño de Sid. No podía esperar para abrirlo. Así que entramos en el patio trasero y dejamos al resto de la familia para preparar el desayuno y otras tareas. Seguí mirándole la cara mientras empezaba a desempacar. No era un regalo que debería mantenerse envuelto por mucho tiempo. Por mucho que me gustaría ayudarlo a abrirlo rápidamente, simplemente no quería perder la mirada de expectativa en su rostro. Después de un poco de lucha, finalmente fue capaz de salirse con la envoltura y se quedó asombrado. Era una jaula de pájaros. ¡Le compré un loro! Me miró ahora, completamente perdido. No sabía qué decir, pero al ver que comenzó a sonreír, dije: "¿Te gusta?" Miró de nuevo al loro y dijo: "Sí, esto es increíble". Esperaba un videojuego o algo así, pero esto es totalmente increíble ". Luego, lentamente, la sonrisa se desvaneció de su rostro. Me acerqué a él y me arrodillé junto a la jaula. El loro parecía tomar su nuevo entorno lentamente. Le pregunté: "¿Cuál es el problema Sid?" "Se ve muy triste. Mi maestro dice que no es bueno enjaular pájaros. Me pregunto si estoy haciendo algo mal aquí "" Por supuesto que no, sé que vas a cuidarlo bien. Eso es lo importante, vivirá en placer contigo y no tiene que buscar comida en la naturaleza. ¿No es Sid? "" Supongo que sí, pero ¿no se aburrirá en una jaula? "" No lo creo, estarás cerca para mantenerlo ocupado ". Entonces le sonreí. Pero tenía una mirada perpleja en su rostro, como si hubiera descubierto una nueva especie y no pudiera entender cómo llamarlo. " "Bueno, un pájaro está destinado a volar. ¿No perderá el vuelo? ”Me sorprendió una pregunta tan simple. Puede que tenga la respuesta a ecuaciones matemáticas complejas, pero en ese momento no pude encontrar una respuesta directa. Un pájaro está destinado a volar. Cualquier analfabeto podría ver la lógica en eso. Es realmente difícil entender la lógica de la captura de un pájaro. Un pájaro vuela, por eso lo consideramos una creación única y hermosa de nuestro mundo. Por lo tanto, capturamos esa belleza en una jaula, para tener un sentimiento de propiedad. ¿Por qué es tan importante poseer la belleza en lugar de apreciarla? Lo gracioso es que, al enjaular al ave, en realidad eliminamos el motivo de nuestro interés, es decir, su capacidad para volar. Usted está aquí para hacerlo cómodo y satisfacer sus necesidades. Es una gran responsabilidad que te estoy confiando ”. ¡Me sentía como un tonto, dando conferencias a un niño de 7 años sobre los deberes y responsabilidades en su cumpleaños! Él solo se sentó y siguió mirando al loro. Le pregunté: "Bueno, ¿cómo quieres llamarlo?" Ignorando mi pregunta, simplemente dijo: "Creo que es muy triste que nunca pueda volar de nuevo" ¡Los niños pueden ser persistentes hasta que su curiosidad esté satisfecha! ¿Cómo podría explicárselo mejor? Que no tengo mejor respuesta que la que ya he dado. Sí, está mal atrapar un pájaro. Es un error atrapar cualquier cosa. Pero eso es lo que hemos estado haciendo durante años. Para mantener las cosas que más apreciamos en las jaulas, por el bien de nuestro placer y mantenerlas a salvo. ¿No hacemos lo mismo con las personas con las que queremos estar cerca? Manténgalos presionados por promesas y relaciones, mientras que las relaciones en realidad están destinadas a apoyar mientras nos elevamos más, no nos derribamos al suelo. ¿Por qué es tan importante defender la ilusión de posesión? La ilusión de que somos dueños de cosas, animales, flores, jardines, ríos, tierras y personas. ¿Por qué es tan difícil dejar ir cosas que ni siquiera eran nuestras? Mientras esos pensamientos seguían corriendo por mi cabeza, mi mente se inundó repentinamente de pensamientos sobre mi padre. Cómo se había mostrado reacio a dejarme ir, pero finalmente había aceptado. 
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¿Por qué nunca me había sentido agradecido por eso? Tal vez lo consideré principalmente como mi victoria y no la victoria de mi padre sobre sí mismo. ¿Cómo pude haber estado tan ciego? Mi madre siempre guardaba silencio al respecto. Tenía tanto por lo que estar agradecido. La forma en que mis padres me dejaron seguir mi camino. Sid volvió su cabeza hacia mí, anticipando alguna respuesta. Le dije: "Sí, parece triste" ¿Y si nunca me hubieran permitido irme? ¿Qué pasa si nunca tengo que hacer las cosas que hago ahora? ¿Qué pasa si nunca tuve la oportunidad de explorarme? ¿Qué pasaría si mis alas estuvieran cortadas? Traté de desviar su atención (y la mía también): "Oye, ¿quieres entrar y ver qué está cocinando hoy?" Él asintió y sosteniendo mi dedo, comenzamos a caminar hacia la puerta del patio. Por el tirón de mi dedo supe que se había detenido. Me pregunté qué pasó ahora. Miré





Su rostro para preguntar, pero antes de que pudiera decir algo, soltó un gruñido: "Creo que deberíamos soltarlo". Parecía muy nervioso. Después de todo, fue un regalo mío y fue un poco grosero decidir deshacerme de él ahora mismo. Su madre estaría furiosa por eso. Le dije: “Claro, si eso es lo que quieres. De hecho, creo que sería bueno "Volvimos a la jaula de nuevo. Le insté a seguir adelante y abrirlo. Lo hizo sin ninguna ayuda, y luego le pedí que se alejara de eso. Caminó hacia atrás, manteniendo su mirada en el loro. Por supuesto, la pequeña criatura verde no estaba familiarizada con tales situaciones, y permaneció en la jaula por un tiempo. Esperamos. Lentamente el loro comenzó a caminar hacia la abertura y se asomó. Se salió y en el suelo. Sentí a Sid realmente rígido, no muy seguro de lo que pasaría. No estoy seguro de cuántos minutos pasaron. ¡Luego voló! Nuestros ojos simplemente rastrearon su vuelo mientras volaba lejos y fuera de la vista. Ni siquiera me di cuenta de que estaba sonriendo. Supongo que no es tan difícil, después de todo, sentirse feliz por la libertad de otro. Era como liberarse a uno mismo de la responsabilidad de algo, por lo que uno no estaba realmente calificado para cuidar. Por supuesto, la jaula es un lugar seguro y cómodo. Pero tal vez algunas plantas crecen mejor si a sí mismas. Uno tiene que dejar de lado las cosas que ama para que crezcan solas, para que sean más adorables. Esa es la ayuda que tal vez la mayoría de la gente espera, la confianza indudable y sin trabas de los demás en que pueden mejorar. La voz de Sid me devolvió "¿De qué estás sonriendo?" Estoy feliz por ese loro y por ti ". Le sonreí ahora. Ahora podíamos escuchar a su madre llamando. Me pregunto si mi madre está despierta ahora. Le dije: "Oye, entremos y veamos qué podemos comer". Claro, vámonos ahora. Cuando entramos en la habitación, dijo: "Creo que lo habría llamado Fishy". Suena genial "" Sí, bueno, ¡creo que Fishy recibió un bonito regalo en tu cumpleaños! Te convertirás en un héroe entre la familia de Fishy ". Se rió de este comentario tonto. Me eché a reír levemente y el resto solo nos miró fijamente, preguntándome en qué maldad hemos estado haciendo.